Bancos y cajas de ahorro

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Desde que se empezaron a extender los bancos y las cajas de ahorro, el conocimiento sobre depósitos y productos relacionados con el dinero se ha ido extendiendo hasta cierto grado entre la población, de al modo que a pesar de que un número muy alto de gente no tiene una cultura económica, todos estamos familiarizados con términos como los de cuenta corriente, tarjetas de crédito o hipotecas.

 Hay quienes se niegan a depositar su dinero en esta entidades, sorbe todo después de las noticias en las que se ha visto que algunas de estas han cometido todo tipo de tropelías con el dinero de sus clientes, pero la realidad es que hoy la mayoría de las transacciones económicas, por pequeñas que estas sean, se realizan de algún modo a través de los bancos y las cajas de ahorro, por lo que es necesario que todos contemos con nuestra propia cuenta para recibir o entregar dinero en cada una de estas operaciones.

 El problema que ha generado en algunas ocasiones una gran confusión es no tener en cuenta que un banco o una caja no deja de ser un negocio, y que como tal hay que exigir una transparencia que nos permita cierto grado de seguridad acerca de lo que se hace realmente con nuestro dinero.