Esta semana en un artículo publicado en Invertia analizábamos el mercado de los mini préstamos, un sector en expansión en nuestro país dadas las restricciones al crédito por parte de las entidades bancarias.
Préstamo 10, CréditoPocket, Qué bueno, Vía SMS o Creditomóvil son algunas de las empresas de capital privado que comercializan mini préstamos en nuestro país. Préstamos de baja cuantía, que rara vez superan los 600 euros y cuyo plazo de devolución va desde un mes hasta 45 días como máximo. Se conceden en pocos minutos y se tramitan o bien por teléfono, o bien por Internet.
Las dificultades de acceso a la financiación, que imponen en la actualidad las entidades bancarias y la situación de crisis económica, que lleva a muchas personas a tener problemas puntuales de liquidez, ha llevado a que la demanda de este “dinero rápido” crezca año a año en nuestro país.
Antes de contratar uno de estos productos debe saber que:
- Las entidades que los comercializan no son entidades financieras sino empresas de capital privado.
- No están supervisadas por el Banco de España.
- Ni están supervisadas por la CNMV.
- Están inscritas en el Registro Mercantil.
- Estos contratos están regulados por la Ley 22/2007 del 11 de julio sobre comercialización a distancia de servicios financieros destinados a los consumidores.
¿Qué ocurre en el resto de países?
En el resto de países, los mini préstamos también se comienzan a regular como una manera de proteger al consumidor.
- Reino Unido: industria en expansión. El importe medio que se concede ronda las 300 libras esterlinas. No existen restricciones en cuanto a los tipos de interés que se aplican, pero las empresas están obligadas por ley a declarar cuál es la TAE que aplican.
- Estados Unidos: son legales pero sólo en 37 Estados. En el resto de Estados están prohibidos de manera explícita o bien por las leyes de la usura.
- Australia: existen limitaciones en los tipos de interés máximo. En determinados Estados, como Nueva Gales del Sur o Queensland han impuesto una tasa máxima del 48%.
- Canadá: tiene un límite del tipo de interés del 60% anual, utilizando para ello la legislación contra la usura.
Aspectos a tener en cuenta
Los mini créditos son productos arriesgados si se utilizan de forma recurrente. Sólo es aconsejable recurrir a ellos cuando se han agotado otras posibilidades. A la hora de contratar un mini préstamo, según el comparador Bankimia.com, debe valorar:
Tipo de interés: suelen ser muy elevados. Los honorarios pueden llegar a ser de hasta el 45% sobre la cantidad solicitada.
Plazos de devolución: al tratarse de periodos tan cortos de tiempo (máximo 45 días) hay que tener la certeza de que se podrá hacer frente al pago de la deuda más los honorarios.
Penalización por impago: en caso de impago, la penalización por impago y mora es muy elevada. Se sitúa en torno al 20% del principal del préstamo.
Se trata, por tanto, de productos arriesgados a los que recurrir sólo en situaciones puntuales y cuando se tenga la certeza absoluta de que se podrá devolver el capital prestado. En ningún caso estos mini préstamos deben convertirse en una fuente habitual de financiación.